hoy no temes a nada,
la euforia te invade.
No sucede todo el tiempo,
no tienes un espíritu revolucionario,
no eres optimista ni capaz de todo.
La voluntad es tarea de cada día,
la rutina envilece el alma,
la rutina seca la sangre.
Es entonces cuando el desgano
abarca terreno y obscurece
el sueño cual tirano.
Suspiras.
Inspiras el aire y se hinchan tus pulmones;
se hacen eco las viejas añoranzas.
Hay en el ambiente aromas mezclados:
jazmines, rosas, citronella.
La jornada de hoy será larga.
Es hora de vivir, te dices siempre.
Dejar de lado los temores.
Han ocurrido maravillosos prodigios.
El destino te ha traido hasta aqui.
Todo el amor que te fue quitado,
todo aquel que te fue prohibido,
todo lo que nunca tuviste
hoy lo tienes recompensado.
Hoy la tristeza ha mutado,
vives de otra manera,
el amor se ha transformado:
inmenso, único,soberano.
Como un Ave Fénix tu corazón resurge
en un inmejorable latido.
La vida es esto que hoy eres.
Esto que hoy amas.
Aquello que fuiste, aquello que amaste.
La vida tiene sus altibajos, cual montaña rusa,
las olas del mar de tus días están elevadas.
¡Rompe la corriente y vuela, mi espíritu,
feliz plenamente!
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